martes, 24 de agosto de 2010

כי לא בשמים היא

כמו היונה של נח, שטרחה לעוף מעבר לכל כוחותיה
רק כדי למצוא מנוח לכף רגלה, וחזרה הביתה לתבה
כשהנסיון שצברה סיגלה אותה למצוא מנוחה בבית, כך אתה:
כי לא בשמים היא, ולא מעבר לים, ולא בתרבות אחרת
ולא הרחק בקצה הארץ ולא בדמיון, כי אם על ידך. צא ולמד,
הבן וראה, ושמח והודה, ומצא ותמצא את הטוב בידך.

viernes, 13 de agosto de 2010

CANTO DE HOMBRE A LA SHEJINAH

por Shraga Jazan
Te vi y me dije que seguro eres tú,
sólo Tú, la chispa que pone vida
en todas ellas. Y me dije que no vi
a nadie sino a Tí, en cada alma que vi.
Mas no soy tan grande para llegar
a tu boca ni a tu vientre ni a tus muslos sagrados:
sólo pequeñas bocas, muslos y vientres pequeños
puede mi celo amar, por amor a Tí. Y salí,
a buscarte por las calles, por los templos y tabernas,
por las playas y los parques, y te hallé mil veces:
en cada cuello, cada pupila y cada sien
a que declaré mi amor por Tí.
Mas las sonrisas, las miradas, las cinturas: ¡no eran Tú!,
y lo decían a voz en pies frente a mi alma hipnotizada.
Me instalo y se desmigajan,
o huyen cuando te buscan mis dedos delicados
entre sus mundos hondos, castos, vastos.
No se conforman con el amor a lo mejor de sí;
me atrapan por fin, con sus paredes que te encierran,
con sus fugaces escalpelos y matrices,
con sus curvas, sus dibujos,
sus caras y más caras que les das por herramienta;
y luego me han tirado, desquerido, suplicado,
rechazado, me han matado
para salvarme de quien son. Y te veo de lejos
y te intuyo al acercarme, al apropiarme:
dentro de cada quien ya no te hallo.
acaso: ¿no estás?... ¡Sí estás!
Entonces soy yo el que no está:
cuando te pierdo de vista y el rumbo hacia Tí
se vuelve azar en lo oscuro, y sólo anhelo salir
para advertirte siquiera. Ay Amor.
De las fuentes del éxtasis restan sólo palabras
sagradas, dichosas, intensas, hermosas, palabras y no más.
Palabras de poemas de otro mundo,
palabras Unas aladas y sin brazos,
palabras que dirigen, que conducen, que no son.
Conozco el laberinto y su mapa y lo enseño
a quien quiera saber de dichas más dichosas que de mí.
Y entretanto me entretengo -hombre soy-
en tus aristas y ángulos omnipresentes,
en cada letra que me anima, en cada atisbo de belleza
sueño, ruego por tí, Amor,
que donde puedas entera revelarte
te atrevas a responder a mi clamor.

Llueve en los desiertos de mi bosque
entre los pájaros pardos de trino azul.
Te me insinúas en luces nuevas por doquier.
Yo sé que se está haciendo el día, y en poco más,
esta noche habrá sabido deliciosa.